Pasó “martes de ch’alla” y sólo se espera el entierro del pepino

Una casa adornada con globos, serpentina y banderines. gran parte de las viviendas fueron ch’alladas ayer. foto: archivo El Diario

Los puestos de la terminal también fueron partícipes de la ch’alla. foto: archivo El Diario

Un bus en la terminal con serpentina y globos. los motorizados fueron adornados.

• Las comparsas se alistan para acompañar a este personaje paceño a su última morada y a despedirse hasta el próximo año.

Pasó el “martes de ch’alla” y sólo resta esperar el entierro del pepino para despedir al carnaval 2009, que este año fue diferente a los demás por la prohibición del juego con agua, que gran parte de la ciudadanía no acató.

Las tiendas, autos y las casas hasta la tarde de ayer aparecieron adornados con globos, serpentinas y banderines, y ch’allados por sus propietarios, que en la mayoría de los casos compartieron bebidas alcohólicas con allegados o amigos.

La venta de trajes de pepino, globos, chisguetes y confites no paró ayer, y más bien fue más intenso por la fecha, en cuyo día la mayor parte de la población agradece a Dios y a la Pachamama por lo recibido, y pide que este año le vaya bien.

Durante la tarde y parte de la noche de ayer los coetillos no dejaron de reventar. Prácticamente desde tempranas horas hasta el cierre de esta edición los propietarios seguían ch’allando sus pertenencias o negocios.

Esa costumbre comenzó el pasado viernes, en la que todas las oficinas fueron adornadas con globos, serpentinas y banderines, y luego empezó el brindis.

El sábado se realizó el corso infantil, en la que participaron muchos niños, pero la desorganización quitó el brillo al desfile de los menores de edad, que se pasearon con trajes típicos y disfraces de sus héroes favoritos.

El domingo se realizó la farándula acostumbrada. Miles de personas ingresaron en la entrada disfrazados, unos de mujeres, otros de políticos, y no se salvó el ex presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Santos Ramírez, que fue representado a través de un disfraz.

Finalmente, el pasado lunes se realizó la Jisk’a Anata. En la entrada participaron grupos y músicos autóctonos, que bailaron y tocaron por una cosecha productiva.

Durante dos semanas el pepino hizo de las suyas, contagió alegría y logró que la gente se olvide un poco de los problemas que tiene, e invitó a la ciudadanía a participar del carnaval paceño.

Ese personaje es el más famoso del departamento paceño junto al ch’uta, que también alegró el carnaval 2009. Decenas de personas se vistieron de éstos personajes y se pasearon por las calles y barrios de La Paz y El Alto.

Pero el próximo domingo, 1 de marzo, llega el fin de la alegría del pepino y se lo despide hasta el próximo año, se alistan las comparsas, que acompañaron a este personaje, para su entierro, que partirá desde la plaza Murillo y se dirigirá al Cementerio General.

En una gran caravana, músicos, comparsas y parientes del pepino serán parte del cortejo fúnebre, y lo acompañarán hasta su última morada.

Y será en el Cementerio General en que las comparsas se despedirán del pepino, mediante una pequeña entrada.

Previo a esa fecha, este “miércoles de ceniza” todavía estará suelto ese personaje paceño, y habrá muchas personas que no lleguen al trabajo.

JUEGO

A pesar de la prohibición de jugar con globos en carnaval, la gente hizo caso omiso, vendió y jugó con globos con agua en los tres días de entrada, y dejaron mucha basura en el centro paceño.

El clima positivo que se vivió en La Paz dio paso a la alegría y al juego con agua, que no pudo ser controlado por la Guardia Municipal, y sólo la Policía atinó a decomisar los famosos ‘chorizos’ que llevan los pepinos.