‘San’ Pau rescata a España de una muerte segura
En el Torwar Hall a más de uno de la expedición española no le llegaba la camisa al cuello antes del partido de España ante Gran Bretaña. Eslovenia acababa de aplastar a Serbia y una derrota ante los ingleses dejaba fuera a los nuestros. El severo batacazo de ayer ante Serbia abría una rendija a la ciencia ficción, porque eso hubiese sido perder ante una selección menor como la británica... Y como tantas y tantas veces, la ficción estuvo a punto de superar a la realidad.
El batacazo habría sido de los que hacen época, con España fuera del Europeo y del Mundial del próximo año –salvo que hubiese llegado una invitación en forma de wild card-, un terremoto de consecuencias impredecibles. El Angolazo y el chinazo, otros ilustres seísmos que sacudieron en el pasado a nuestro baloncesto, se hubiesen quedado pequeños a su lado.
Sin embargo, la realidad se impuso in extremis, aunque de forma inesperadamente agónica. España no anda fina, más bien chirría bastante, pero aun así es mejor equipo que Gran Bretaña de aquí a Lima, aunque no lo demostró, y esto ya empieza a ser preocupante. Se apuntó una victoria tan crucial como miserable y burló la tragedia. Necesitó, eso sí, que se le apareciese ‘San’ Pau en el tramo final del partido para sacarle del sarcófago, cuando los ingleses se les habían subido a las barbas definitivamente (69-73, min. 36). Y no precisamente a las del de Sant Boi.
España empezó el partido a mil por hora. Pau, el que menos ganas tenía de abandonar Polonia antes de tiempo, se puso las pilas desde el salto inicial –anotó cuatro tiros libres seguidos, sacudiéndose el 1/8 del día anterior, y hasta metió un triple-, y España, en un santiamén, despegó como un cohete (19-5, min.7). Scariolo lo vio tan bien, que hizo reaparecer a Rudy, y el mallorquín no defraudó. Ocho puntos suyos, con dos triples, consolidaron la ventaja española en el primer cuarto (25-15). Los chispazos de Claver, liberado ya de los nervios del debut, y las apariciones esporádicas de Pau mantuvieron a España en el segundo acto.
Mientras España dominó el rebote en ambas zonas y evitó que los ingleses desplegaran la velocidad, una de sus mejores armas, no pasó apuros. En ataque estático Gran Bretaña se paralizaba y sólo Freeland -extraordinaria la calidad del nuevo jugador del Unicaja-, y Lenzly evitaron el despegue definitivo de los de Scariolo (30-23), que comenzaron a reducir su intensidad defensiva de forma sospechosa.
Los ingleses lo percibieron y se tiraron a la yugular, saltándose a la torera una zona 2-3 a la que acabaron siendo inmunes, ante la quiescencia de Scariolo. Así, el tranquilizador 55-42 que reflejaba el marcador en el minuto 26, se esfumó como vino, en un abrir y cerrar de ojos. Una técnica a Rudy, un 2+1 de Reinking, un triple de Hart y otro de Lenzly acabaron por sembrar el terror entre los españoles (68-67, min 33), que se estrellaban una y otra vez en la zona inglesa víctimas de su inoperancia y lastrados por una alarmante falta de ideas.
EL DATO
4 son los puntos por los que España perdía a falta de cinco minutos del final del partido
Las canillas empezaron a tambalearse entre la plantilla española: Raúl erró un pase, Marc hizo pasos… Las de todos menos las de Pau, que tiró de galones para evitar el desastre. Un rebote ofensivo suyo y un tiro libre evitaron un descalabro prematuro (69-73, min 36), tras un nuevo triple de Hart. Luego, un prodigioso robo de Rudy acercó a los españoles (71-73), pero fue Pau, con un triple mientras todos sus compañeros deliraban sobre la cancha (74-73, min 37) el que devolvió a la vida a España. Un tapón de Ricky a Boyd y otro de Pau, que añadió tres puntos más a su cuenta, evitaron el desastre que Navarro definitivamente disipó con un triple (78-73, a 1:25 del final).
El juego de los españoles continúa siendo preocupante. Adolece de fluidez, de cohesión alguna y sobre todo de chispa, pero aún así, si España gana mañana a Eslovenia por más de diez puntos –cosa harto difícil con este juego infame– pasará a la segunda fase como primera de grupo. Eso sí, si pierde ante Eslovenia y Gran Bretaña gana a Serbia en el último partido de la jornada, podría quedar eliminada del Eurobasket dependiendo del ‘basketaverage’. El terremoto sigue acechando.
No hay comentarios
Publicar un comentario