El Consejo iraní admite anomalías en elecciones

En el décimo día de la crisis que vive ese país, ayer hubo marchas de protestas y fueron reprimidas. El órgano supervisor de las elecciones dice que hay irregularidades en 5O distritos de ese país.

• REPRESIÓN • La policía iraní antidisturbios pasa en medio del tráfico para intervenir una manifestación de opositores. La policía de Irán lanzó gases lacrimógenos contra una marcha opositora que, en desafío de los pedidos del Gobierno, salió a las calles de Teherán ayer a protestar por los resultados de las elecciones de hace 10 días en las que el presidente Mahmoud Ahmadinejad resultó reelegido. Esto ocurre horas después de que el poderoso Consejo de Guardianes, órgano supervisor de las elecciones en Irán, reconociera que en los comicios se dieron irregularidades en 50 distritos electorales. Además, la Guardia Revolucionaria —la fuerza militar más poderosa del país— advirtió en su página de internet a la oposición que no realice más marchas. El líder opositor Mir Hossein Mousavi recordó a sus seguidores que tienen derecho a protestar, y se organizó una nueva manifestación a través de sitios de internet como Twitter. Ayer por la mañana el vocero del Consejo de Guardianes, Abbas Alí Kadkhodaei, reconoció que el número de votos depositados hace 10 días en 50 ciudades sobrepasa el número de votantes registrados, aunque indicó que esto no alteraría el resultado global de las elecciones. Según Kadkhodaei, incluso si las irregularidades afectaran a la totalidad de los votos de esas jurisdicciones, que suman un total de tres millones, la diferencia no sería suficiente para forzar una segunda vuelta. En los comicios del 12 de junio, el actual presidente, Mahmmoud Ahmadinejad, resultó reelecto para un nuevo mandato de cuatro años, derrotando a otros cuatro contendientes. La admisión del Consejo de Guardianes llegó tras una semana de grandes tensiones, especialmente en la capital Teherán, que continuaban ayer en memoria de los fallecidos. La oposición se congregó en varias oportunidades en protesta por el presunto fraude, y las manifestaciones derivaron en episodios de violencia que este fin de semana se cobraron la vida de al menos 10 personas. Además, alrededor de 450 manifestantes fueron detenidos. Las autoridades del país islámico habían advertido en contra de nuevas marchas de protesta y manifestaciones, y la policía y las fuerzas de élite del ejército tenían órdenes de abordar con "firmeza" a quienes desafiaran el mandato del líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei. El fin de semana, los manifestantes fueron calificados de "terroristas" por la prensa oficial iraní, y los líderes de la oposición de "criminales" instigados por potencias extranjeras, que de acuerdo a lo que dijo el Gobierno son las últimas responsables de los enfrentamientos del fin de semana. BBC Mundo.