El diálogo agoniza y el MAS alista el cierre del Congreso

La falta de acuerdos sobre el Padrón Electoral trabó las negociaciones. Los parlamentarios masistas redactaron sus renuncias y el Presidente se reunió de emergencia con el Alto Mando Militar y sus bases sociales.

• A medianoche • Un grupo de campesinos, entre hombres y mujeres, hace una vigilia fuera del Parlamento. El diálogo congresal para aprobar la Ley de Régimen Electoral de Transición se trabó ayer sin haber formalizado un solo acuerdo entre oficialistas y opositores. Ante este panorama, el oficialismo preparó el terreno para precipitar el cierre del Parlamento mediante la renuncia colectiva de todos sus parlamentarios. Esta madrugada (3.00), el pleno del Congreso continuaba debatiendo sobre el proyecto de ley electoral, tras una intensa jornada de negociaciones que no logró acuerdos y que, contrariamente, reveló posiciones irreconciliables en temas como el Padrón Electoral, el voto en el exterior y el número de escaños indígenas. Ante los desacuerdos, las bases sociales del MAS anunciaron que pedirán la renuncia a sus parlamentarios si no logran aprobar la ley hasta las 7.00 de hoy. “Además, asumiremos medidas que serán una sorpresa”, anunció el presidente de la Coordinadora Nacional por el Cambio, Fidel Surco, cuando a la 1.37 de esta madrugada abandonaba las instala- ciones del Palacio de Gobierno, donde se reunió de emergencia con el presidente Evo Morales. Surco fue convocado al Palacio junto a otros dirigentes de los sectores sociales oficialistas, al mismo tiempo que los jefes del Alto Mando de la Policía y de las Fuerzas Armadas. Fuentes del MAS revelaron que, en ambos casos, el encuentro fue para analizar las eventuales consecuencias sociales de una renuncia colectiva de los parlamentarios masistas y el consecuente cierre del Congreso. De hecho, durante la tarde, a la par del retroceso en el diálogo parlamentario, los legisladores del MAS comenzaron a revelar a los periodistas el contenido de sus cartas de renuncia, las que dijeron que las entregarían al término de la jornada si fracasaban las negociaciones políticas. A la medianoche, el vicepresidente Álvaro García Linera inauguró la sesión congresal del 9 de abril, momento en que, refiriéndose a los masistas, los opositores gritaron: “¡que presenten sus renuncias!”, “¡que presenten sus renuncias!”. Ninguno lo hizo. A la 1.00 de la madrugada, el vicepresidente Álvaro García Linera informó al plenario congresal que existía una treintena de oradores inscritos, lo que le hacía presumir que la sesión se prolongaría al menos hasta el mediodía de este viernes. “Los que tienen procesión programada, vayan suspendiéndola”, ironizó. La jordana comenzó con expresiones de malestar de los sectores indígenas, que se enteraron a través de los medios de comunicación que, en el marco del diálogo parlamentario, el MAS había decidido bajar de 14 a 11 el número de escaños indígenas. El llanto del presidente de la CIDOB, Adolfo Chávez, reflejó el estado de ánimo de este sector, que se declaró traicionado por el MAS y anunció que presentará una denuncia ante la ONU. A las 10.00 am, el presidente de la Corte Nacional Electoral, José Luis Exeni, ingresó al escenario del diálogo, en el Senado, donde informó que era imposible elaborar un nuevo Padrón Electoral para las elecciones del 6 de diciembre, tal como exige la oposición, pero sí garantizar el voto en el exterior, tal como plantea el proyecto electoral oficialista. Esto provocó molestia en la oposición. El senador Walter Guiteras (Podemos) dijo que era “inadmisible” que la CNE garantice el voto en el exterior y que no pueda realizar un reempadronamiento en el país. “Nos preocupa que la Corte Nacional, por un lado, haya planteado que existirían las condiciones técnicas para desarrollar un padrón en el exterior en los próximos 90 días y que el padrón al interior del país recién se terminaría de hacer en enero, después de las elecciones...no es coherente”, coincidió el presidente del Senado, Óscar Ortiz. En la tarde, Exeni fue convocado por segunda vez a la comisión, donde propuso revisar los casos dudosos del padrón, lo que no convenció a la oposición. Esta madrugada, oficialistas y opositores continuaban debatiendo en el Congreso, en una sesión declarada por tiempo y materia.