Oposición regional califica como nuevo “show” a convocatoria para pacto

La primera reunión perfiló las primeras líneas de acción que el Gobierno considera importantes para luchar contra el terrorismo, mientras autoridades de la Prefectura de Santa Cruz decidieron no asistir al encuentro..

• Asegura que la actitud del Ejecutivo es parte de una campaña de amedrentamiento y de terrorismo de Estado contra Santa Cruz
• Reunión -donde asistió el titular de la CEPB- en la Casa de Gobierno perfiló primeras medidas contra este tipo de acciones.

Santa Cruz, (EL DIARIO y ANF).- Las autoridades de la Prefectura cruceña y de la oposición política rechazaron ayer la convocatoria a la firma de un pacto antiterrorista lanzado por el presidente Evo Morales, acto que fue calificado como un nuevo “show” del Gobierno. La cita se inició a horas 18.00 en Palacio Quemado y terminó cuatro horas y media después .

El secretario de Autonomías, Carlos Dabdoub, dijo horas antes del inicio de la reunión, que no asistirán al llamado del Ejecutivo que convocó a los prefectos y sectores sociales para conformar un pacto contra el terrorismo, criticó la ley que el Gobierno pretende implementar y dijo que esta nueva norma sólo servirá para confiscar bienes a empresarios supuestamente ligados con actos terroristas.

Dabdoub aseguró que en caso de aplicarse esta propuesta oficialista, aparecerán más montajes y denuncias de supuestos testigos con el fin de continuar desprestigiando al departamento cruceño. “No puede haber diálogo si persiguen a nuestras instituciones, tienen ese cinismo de inventarse este diálogo. Es una forma de espantar a las inversiones, quieren poner en peligro la integridad y patrimonio de los empresarios”, aseguró.

En tanto, acotó que la investigación del caso cada vez se complica más y descalificó al fiscal paceño Marcelo Sosa a quien acusó de ser el portavoz oficial del Gobierno Central. Por ello, aseguró que presentarán pruebas jurídicas basadas en la Ley de Procedimiento Penal, donde se establece el respeto a la competencia jurisdiccional en caso de que Rubén Costas reciba alguna citación.

Afirmó que siempre habrá líderes dentro de la institucionalidad cruceña, situación que, según la autoridad, no le alcanzará al oficialismo para intentar meter presos a todos. “Sosa tiene un amplio expediente en Santa Cruz y La Paz, cada vez son menos creíbles las pruebas, es una mala novela venezolana con capítulos que no están concatenados”, dijo el funcionario.

REUNIÓN “ANTITERRORISTA

La primera reunión de trabajo para sellar el denominado pacto antiterrorista, perfiló la noche de ayer las líneas de acción que el Gobierno considera importantes para luchar contra el terrorismo, que comenzarán con una campaña informativa y una marcha nacional contra este delito que es considerado por el Ejecutivo como traición a la patria.

Participaron prefectos oficialistas, parlamentarios del MAS, y sectores sociales afines al Gobierno, además del presidente de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), Gabriel Dabdoub. La oposición política y regional no asistió al evento al que calificaron como un nuevo “show” del Gobierno.

El encuentro no terminó con un pacto definitivo para la lucha frontal contra el terrorismo y actos separatistas que supuestamente asolan al país tras la desarticulación de la supuesta célula terrorista que fue desbaratada la madrugada del 16 de abril en un céntrico hotel de Santa Cruz, con la muerte del boliviano – húngaro, Eduardo Rózsa, supuesto cabecilla de esta organización irregular que habría venido a dividir al país, según el Gobierno y la Fiscalía paceña.

El presidente Morales, que inauguró el evento calificó como mercenarios a los grupos separatistas que estarían operando en Bolivia para fracturar la integridad nacional y criticó duramente a las instituciones que no acudieron a su convocatoria.

Tras su discurso inicial, el Mandatario dejó al ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, conducir la reunión, tras lo cual, y luego de escuchar las ponencias de los diversos sectores, todos oficialistas con excepción de la CEPB, leyó las conclusiones que arrojó el evento, que no será el único, ya que se espera una nueva convocatoria del Presidente.

El primer punto en consenso fue el repudio general a los actos supuestamente separatistas que se estarían gestando en el país. Los presentes también pidieron sancionar a los responsables de estos actos con las penas máximas que establecen las leyes.

En este sentido, se planteó la necesidad de elevar los procesos a un marco jurídico preciso que sancione estas dos figuras como delito de traición a la patria, que debería ser, según fue planteado en el encuentro, el paraguas a partir del cual se sancione los actos que atenten contra la unidad nacional.

Los asistentes a la reunión pidieron que el Estado boliviano ejerza mayor control territorial en los lugares que históricamente fueron abandonadas, y por ende, propensas a cultivar acciones ilegales como todo tipo de contrabando, tráfico de armas y narcotráfico, por lo que se pidió cortar desde raíz el financiamiento a actividades separatistas o terroristas.

El prefecto de La Paz, Pablo Ramos, planteó la necesidad de aplicar la Constitución Política del Estado y los convenios internacionales que sancionan al terrorismo con el mayor rigor posible.

En ese entendido, también se planteó crear una comisión permanente para resguardar la seguridad del Estado para impulsar además iniciativas para mejorar la seguridad del país.

También se planteó llamar a una marcha nacional para repudiar los actos como una expresión del espíritu de unidad nacional y por lo tanto solamente quedaría pendiente definir fecha y hora para que las instituciones promuevan la movilización.

El presidente de la CEPB, Gabriel Dabdoub, pidió por su parte ampliar este pacto nacional para que desde todos los sectores se puedan tratar los temas más importantes para Bolivia.

En este sentido pidió convocar a las autoridades departamentales, movimientos cívicos de todo el país, fuerzas políticas de oposición, la Iglesia y demás instituciones de la sociedad. “De otra forma estamos frente a un acuerdo parcial que no tendrá mayores impactos”, señaló.